Nuestro carnaval se ha hecho esperar este año, pero no hay
condición climatológica adversa que haga sombra a nuestros soles.
Como siempre, padres, profes, alumnos y el resto de
protagonistas del Benedetti han hecho gala de una gran creatividad y de ese enorme
sentido del humor que tiene que acompañar siempre a nuestra fiesta más satírica.
Allí estábamos, familiares y amigos rodeando el patio
central de nuestro cole. Y mientras los artistas se daban los últimos retoques
nos amenizaba la fría espera nuestra speaker
de lujo, con juegos, chascarrillos mucho sentido del humor y algún que otro spoiler que no creo que quite las ganas
de descubrir o releer los títulos que
hemos conocido en esta gran fiesta.
Acompañadnos en esta historia que han creado, para todos
nosotros, nuestros protagonistas y
también veréis volar vuestra imaginación de manos de nuestros personajes de
cuento, de novela y de cómic engalanados con un montón de colores, sorpresas y
sonrisas...
Todo comenzó con los más chiquinines, los de 3 años. Esos
que en cuanto asoman por el patio y comienzan a desfilar siempre van
acompañados de un tierno “ooooooh”. De su mano nos desplazamos quizá hasta una
granja llena de guapísimos “pollos Pepe” acompañados por sus mamás gallinas.
Los asistentes comenzaron a aplaudir emocionados y no era para menos, con sus
cortas patitas, sus picos y sus barrigas desfilaron elegantísimos.
Les siguieron los compañeros de 4 años y de repente la pista
se volvió blanca y negra mientras nos desplazábamos, allá donde se acaba el
mundo, junto con “La cebra Camila”. ¿Nos estarán tratando de decir, nuestros
pequeños, que ya se están haciendo mayores?, desde luego, con las nuevas rayas de
sus vestidos, nuestros grandes chicos y chicas, lucieron encantadores.
Los mayores de infantil, con sus cinco añazos, sorprendieron con una variedad
de colores y formas. Nos encontramos con tortugas, elefantes, jirafas, cebras,
leones, zorros, monos, ratones y ¡un astronauta! ¿Habrán logrado dar ese
mordisquito a sus profes-lunas? Bravo por la selección de disfraces, menuda
imaginación y trabajo.
Y tras esta historia de compañerismo y constancia...
...Irrumpen en la pista unas animadas y pizpiretas
caperucitas rojas y unos bailongos lobos, no muy feroces, que arrancaron los
aplausos de los concurrentes y nos hicieron entrar en calor en la fría mañana.
Genial, también, la selección musical que acompañaba a cada curso en su
desfile.
Pero... ¡oh, no!, ¡un lobo se ha escapado del cuento de Caperucita para comerse a una cebra Camila! ¡Ah, no! falsa alarma, ¡solo va a comérsela a besos!
Monstruosamente magistral fue también la entrada de los
compañeros de segundo representándonos “El pequeño vampiro” con marchosa
coreografía incluida: esas historias de
amistad y aventuras entre un niño y una familia de vampiros. La diferencia nunca fue un
impedimento para la amistad.
Y claro, en una celebración como la nuestra, no podía faltar
nuestra marea verde, aunque esta está formada por nuestras tortugas de tercero
y “Agu Trot”. Qué grandes son, ya, nuestros chicos, qué energía, qué originalidad
en sus caparazones y qué choques de mano a sus compis más pequeños.
Maravillosa la historia que nos narran ahora los chavales de
cuarto. “Ojo de Nube” un niño de una tribu de indios crow que nace ciego. El
patio se tiñe de plumas de colores y tonos marrones y ocres. Nos cuentan un
relato de superación y de coraje: el de todos y cada uno de estos chicos que
serán los que cambien nuestro mundo.
En la siguiente intervención: música inquietante, luz tenue
(igual alguna nube cómplice) ¿qué ven mis ojos?, túnicas, varitas y escobas. Largas
barbas de brujo y sombreros puntiagudos: los alumnos de quinto curso nos
embrujan con “Harry Potter”.
Pero no os lo perdáis, incluso nos regalaron una
representación de un partido de quidditch entre Slytherin y Gryffindor. Ese sí
que fue un momento mágico...
En este clima de encanto aparecieron nuestros alumnos y
alumnas más mayores. Escondidos tras la máscara de Batman. Efectivamente,
contamos con unos superhéroes y superheroínas que no necesitan de poderes para
realizar actos extraordinarios.
Y cuando ya no podíamos con más emociones, las alumnas de
sexto se dirigieron al centro de la pista, se despojaron de capas, espinilleras
y brazaletes y nos obsequiaron con un baile cuya coreografía han preparado
ellas mismas en los recreos. ¡Muchísimas gracias chicas, sois geniales!
Fue una mañana estupenda, pero había más sorpresas
escondidas por cada rincón. ¿Podréis averiguar de qué cuentos se han escapado
nuestros siguientes personajes?
Pásate por nuestro Facebook y podrás ver también la actuación que nos regalaron en conjunto, ¡preciosa!
Muchísimas gracias a todos por hacerlo posible. ¡Hemos
disfrutado muchísimo! Esperemos que el espíritu mágico, jocoso y dicharachero
del carnaval nos acompañe hasta las
próximas vacaciones.
¡Hasta pronto!