Entrevista a Pilar Camacho

“Todos y cada uno de nosotros somos válidos. No es cierto que ‘no todos los voluntarios valen’, todos tenemos mucho que ofrecer, aunque solo sea el ejemplo de generosidad, de solidaridad, de ofrecer parte de nuestro tiempo libre por el bien de la educación, de esas cosas que perciben y aprenden sin esfuerzo todos los niños con los que interactuamos, cosas que ayudan a hacer un mundo mejor.”

Estas palabras animándonos a la participación como voluntarios del proyecto includ-ed las escribió Pilar Camacho en mayo de 2015 para el blog educativo La buhardilla del Benedetti.

No se trata de palabras vacías, porque si algo caracteriza a Pilar es la gran fuerza de voluntad, la franqueza, la solidaridad y la generosidad que la han impulsado a ser pionera de importantes proyectos en nuestro municipio.

Fue miembro fundador de la Red de Recuperación de Alimentos de Rivas (RARR), con la que sigue colaborando muy activamente.

Fue una de las primeras voluntarias en grupos interactivos, antes incluso de que el proyecto includ-ed comenzara oficialmente a dar sus primeros pasos en nuestro municipio. Ya en 2011 moderaba grupos de alumnos del Mario Benedetti en las sesiones de matemáticas del Supermercado en el hall del centro educativo, proyecto de Francisca Pérez que recibió mención de honor en el Premio Acción Magistral del año 2012. Desde entonces ha participado como voluntaria en cientos de sesiones de grupos interactivos, lecturas acompañadas, tertulias literarias, grupos de investigación y asambleas dialógicas, escuchando y ofreciendo su apoyo y cariño en las aulas a varias generaciones de alumnos que la adoran. Desde 2014 es coordinadora del voluntariado de dicho centro, que gracias a ella ha pasado de contar con apenas una veintena de colaboradores a los más de ciento treinta del último curso.

Ha sido pionera también en Rivas del proyecto LÓVA (La Ópera como Vehículo de Aprendizaje), siendo en 2013 una de las primeras voluntarias de esa primera experiencia, acompañando al profesor Pedro Nieto y a los coordinadores del proyecto en España, Pedro Sarmiento y Miguel Gil.

En 2015 puso en marcha la Biblioteca tutorizada del CEIP Mario Benedetti, otra de las Actuaciones Educativas de Éxito del proyecto includ-ed. En ella, entre otras cosas, los alumnos crearon el blog antes mencionado que ganaría ese año el IX Premio de Espiral Edublogs a uno de los mejores blogs educativos de alumnos de primaria.

Desde ese mismo curso, Pilar Camacho formó parte de la Comisión de Actuaciones Educativas de Éxito de Rivas, participando muy activamente en la subcomisión de investigación y en las tertulias pedagógicas dialógicas mensuales del municipio.

Cuando en 2016 el CEIP Mario Benedetti se transformó en Comunidad de Aprendizaje, nacieron las comisiones mixtas y Pilar se incorporó a la Comisión gestora tras recibir el curso de sensibilización.

Durante esos años colaboró en la investigación de Lars Bonell para su tesis doctoral La promoción de la participación educativa de las familias en la escuela desde una perspectiva transformadora y no ha parado de preparase en seminarios, cursos y encuentros relacionados con el aprendizaje dialógico, la inclusión en las aulas o la educación emocional.

Asimismo ha participado muy activamente en la organización de los tres encuentros de Actuaciones Educativas de Éxito que han tenido lugar en Rivas. En 2015, durante el II Encuentro, junto a estudiantes del centro compartió con los asistentes su experiencia en la creación de la biblioteca tutorizada y el blog educativo del CEIP Mario Benedetti.

En 2016 con Ángel Jiménez en el V Encuentro internacional de Comunidades de Aprendizaje presentó en Valencia la comunicación sobre “Participación del voluntariado y extensión del tiempo de aprendizaje.”

En 2017, junto a Mar Mora, ha presentado la comunicación “Coordinadoras de voluntariado: un eslabón fundamental en la cadena de solidaridad de las Actuaciones Educativas de Éxito” en el Congreso internacional multidisciplinar de investigación educativa (CIMIE) celebrado en la Universidad de Deusto en Bilbao.

También este año hemos podido escucharla en el Teatro Real de Madrid dando voz a las familias de los alumnos que han participado en el proyecto LÓVA.

Actualmente colabora además en los seminarios mensuales de la Universidad de La Salle como miembro de la Red de Comunidades de Aprendizaje y Actuaciones Educativas de Éxito de Madrid y la subcomisión de Participación familiar.

Durante estos últimos años ha participado en estos y otros muchos encuentros, reportajes de prensa o programas de radio compartiendo generosamente su larga experiencia en torno a la participación de la comunidad en el sistema educativo.

De alguna manera, en todos esos medios y encuentros municipales, nacionales e internacionales en los que viene participando, Pilar Camacho representa la voz de muchas familias y voluntariado de Rivas Vaciamadrid que lucha día a día por una transformación social a través de la educación pública.

Por toda esta trayectoria, siempre entregada y comprometida en la mejora de la educación para ayudar a conseguir un mundo mejor, presentamos a Pilar Camacho como candidata al VIII certamen de los Premios al compromiso educativo Profesor Julio Pérez en la categoría de personal no docente. (Finalmente, por decisión del SACE,  los voluntarios entraron en la categoría de familias).

Esta exposición de motivos la elaboró, con mucho cariño Ángel Jiménez, compañero de andanzas pasadas, presentes y futuras y otro soñador nato, navegante también de nuestro navío “El Mario Benedetti”.

Pilar ha sido la ganadora, este año 2017, en la categoría de familias y encarna en su vida, en su trayectoria de trabajo y en su manera de ser, los valores que inspiran estos premios: los de compromiso, valía y generosidad.

Pilar, enhorabuena por tu premio, para nosotros era muy importante que se reconociera y premiara tu labor, puesto que nosotros, desde el centro, ya no sabemos cómo darte las gracias. Queríamos saber ¿qué pensaste cuándo te contaron que habías sido nominada? ¿Cómo te sentiste?

Lo primero que si se habían equivocado. Porque además se lo pregunté varias veces a la chica, le dije: –¿estás segura de que soy yo? Y a la tercera ya me convencí de que era yo.

Y después, emocionada. No sabía quién me había nominado. A ver, sabía que era alguien del cole, me imaginaba que era alguien del cole, pero no sabía exactamente quién. Cuando luego me enteré que era claustro y AMPA pues la emoción ya fue superior. Muy emocionada, por una parte, pensé que era demasiado llegar hasta allí para recoger un premio. Solamente la nominación, a mí, ya me ha valido porque son conquistas todos los días, y bueno, un poco abrumada según ha ido pasado el tiempo.

Hay muchas cosas en tu currículum que han aportado un gran valor a nuestro cole, pero hay dos que subrayaría: la importancia que ha tenido tu actuación como promotora en la semilla que permitió que germinara el cambio en nuestro centro y por otro lado el tremendo esfuerzo y trabajo que has realizado y sigues realizando para que nuestro sueño siga adelante. ¿Qué te impulsó a lanzarte a participar de un a manera tan activa en el cole?

Lo que me impulsó, realmente, fue que yo siempre he colaborado en los coles de mis hijos, de alguna forma. Cada vez que decían: —Hacen falta padres —allá que iba yo. Incluso  cuando trabajaba, me reservaba días de permiso para esas cosas.

Cuando ya aquí, más activamente, Paqui, que es la que empezó con todo esto, me dijo que entrara en clase, bueno, en clase no, en el mercadillo, era yo sola la que entraba. Y dices, —qué bien, vengo a la clase de mi hija, la veo en su ambiente, en su mundo —que es lo que a mí me gustaba. Pero realmente lo que me impulsó fue cuando llevando un año, más o menos, con Paqui, otra profe, Olivia, se animó también a hacerlo pero no tenía voluntarios. Y le dijo Paqui: —Pues a lo mejor Pili, se puede ir contigo —y cuando entré a clase de Olivia... dije: —esto no puede ser, esto es demasiado.

Porque  te cambia mucho el estar en clase de tu hijo, que entras porque estás en clase de tu hijo, ¡qué bien! Pero cuando entras a una clase que no eres nadie, eres una más. Y cuando vi lo que había en esa clase, y vi lo que Olivia trabajaba,  dije: —aquí hay que remangarse y echar una mano.

¿Qué te alienta a seguir cuando hace ya tres años que tu pequeña pasó al instituto?

Pues eso me pregunto yo todos los días. Debe ser que en mi casa tengo adolescentes y no me besan tanto. No tengo ni idea, no tengo ni idea...

Yo sé que la primera vez que entré, después de haberse ido mis hijos, me sentí como que yo no era de aquí. Una sensación rara: — ¿Yo qué hago aquí?, si yo no soy madre, yo no soy nada, ¿yo qué hago aquí?.

Pero supongo que lo que me alienta es todas las historias que he ido conociendo en todo este tiempo, estas historias que tienen nombre y apellidos, esas historias que tienen sobre todo nombres de niños, y algunas muy entrañables y otras un poco duras, pero que es lo que me alienta. Y sobre todo la fama, esa fama, que tiene el cole fuera y que no se merece nadie de los que están aquí dentro.

No podéis imaginaros el tremendo trabajo que va detrás de los grupos interactivos en nuestro cole: cuadrar voluntarios, organizarnos, formarnos (y deformarnos), dinamizarnos, incluso darnos tirones de orejas, pero sobre todo mimarnos, apoyarnos y querernos. ¿Cuánto tiempo te supone? ¿Cómo logras hacerlo tan bien?

Bueno, como tiempo... Yo estoy abierta 24 horas, como las farmacias de guarida. Tanto como para recibir Whatsapp, ver si faltan voluntarios y hacerme el harakiri, como para rescatar voluntarios de la cola del pan o de donde haga falta. Y... ¿qué era lo otro?

¿Cómo logras hacerlo tan bien?

Bueno, tan bien... Cómo logro hacerlo. Hay mucho que mejorar y hay mucho que avanzar todavía.

Pues yo que sé, la gente se ríe porque, cuando veo que no salen las cosas, antes me desesperaba y lloraba y ahora digo: —Pues... Soñaremos — y como desde hace un montón de años mi palabra favorita es “fluir” pues yo fluyo. Me acuesto tranquilamente y ya saldrá el sol por donde salga y ya está, y luego suele salir.

Hay mucho que mejorar todavía, y es un trabajo de mucha gente no sólo mío.

¿Qué es lo más duro de tu trabajo en el cole? ¿Has encontrado muchas piedras en el camino?

Más que piedras, chinas. Que las chinas hacen más daño que las piedras. Cuando se te mete la china en el zapato...

Las chinas tienen su aquel, pero bueno... Supongo que lo más duro es cuando no encuentras voluntarios. Cuando no encuentras voluntarios y tú quieres, a toda costa, que esos niños lo hagan y sobre todo que ese profe lo pueda hacer. Porque ves toda  la ilusión que ellos tienen.

Piedras y chinas, pues por todos los lados, supongo. Algunas se solventan, otras te duran un poco más pero... pero bueno.

Y dado que aliciente salarial no tienes… ¿cuál es la parte que más te gusta de tu trabajo? ¿Merece la pena?

Merecer la pena siempre. Siempre.

Y es el mejor trabajo pagado. ¿En dónde vas y te dan besos y abrazos todos los días?, los niños, los padres, los profes.

El otro día, no se con quién lo  hablaba, y se reía. Que yo el cole no lo tengo clasificado por 2ºA, 3ºA, infantil 4 años... Lo tengo por los sentimientos. Entonces, depende de cómo me levante, yo sé a qué clase tengo que ir porque en una me dan achuchones, en otras me dan besos, en otra me río.

Es muy emocionante. Muy emocionante. Sobre todo porque es un trabajo de muuucha muuucha gente durante muchísimo tiempo. A lo mejor ahora, sobre todo la gente que viene nueva, ve que es un cole que mola, que funciona. A mejorar siempre es a mejorar. Pero es que ha habido tanta gente que ha pasado por aquí con el mismo interés porque este cole siguiera adelante, que solamente eso... Y también, porque somos unos privilegiados los que podemos entrar por las clases. Ver lo que hay. Y cuando salimos fuera del cole, llegar a los sitios donde los que están en el cole no llegan. Sean profesores, sean familias, entonces...O sea, no es que yo sea la voz de nadie, sino que hay mucha gente, como yo, que llegan donde los demás no pueden llegar, es como una cadena.

Muchísimas gracias por haber ayudado a transformar nuestro cole y por seguir formando parte de nuestro proyecto común, por creer en todos nosotros y por regalarnos en tus propias palabras “tú tiempo y tus manos”. ¿Qué me dejo en el tintero? ¿Quieres añadir algo más?

Añadir... Pues que animo a las familias a que participan mucho más porque no saben lo que se pierden y, sobre todo, que se animen a participar en clases distintas a las de sus hijos, porque es lo que realmente te llena como voluntario.